El análisis
moderno de ADN es tan sensible que la contaminación es un gran problema, con el
potencial de alejar las investigaciones criminales en la dirección equivocada.
En Alemania en
2007, restos de ADN pertenecientes a una mujer no identificada fueron hallados
en la escena del asesinato de un policía.
Cuando se
comparó con la base de datos alemana, se observó que ADN idéntico había estado
presente en la escena de otros cinco asesinatos en Alemania y Francia, junto a
varios asaltos y robos de coches.
La contaminación
de las muestras puede provocar una falsa pista en las pesquisas.
En total, habían
encontrado el ADN de la mujer en 40 escenas criminales separadas.
Los bastoncillos
habían sido contaminados accidentalmente por una mujer que trabajaban en la
fábrica que los producía.
Durante años el
ADN ha sido visto como el arma infalible en la lucha contra el crimen, con
condenas resultantes a partir incluso de los más pequeños rastros, pero en
muchos sentidos el análisis de ADN se ha convertido en una víctima de su propio
éxito.
Ahora que
tenemos la capacidad de crear un perfil de ADN a partir de unas pocas células
humanas, los restos pueden encontrarse casi en cualquier parte.
Pero como todos
dejamos ADN por todos lados, la importancia del hallazgo y análisis de estos
restos será cada vez más abierta a interpretaciones a menos que haya suficiente
material genético presente como para eliminar la posibilidad de un contacto
secundario o de contaminación, o que haya evidencia adicional que señale al
sospechoso.
Fuente:
http://www.bbc.com